Los fanzines son publicaciones pequeñas, independientes y autogestionadas que tratan temas variados para una comunidad de aficionados. Se editan de forma casera, fácil y divertida con recursos limitados y de la distribución se encarga el propio autor.
Una vez que sabemos que se trata de una especie de revistas para aficionados, ¿cómo empezar a hacer un fanzine?
Vamos a crear un fanzine de 16 páginas (14 más la portada y la contraportada) en formato A4. Para ello trabajaremos con una impresora A3. Hemos dividido el proceso en 12 pasos:
1-. Por cada ejemplar de fanzine necesitamos 4 hojas de papel DIN A3 que se doblarán en horizontal formando un A4 vertical, como si fuera una revista.
2-. Elegir la temática del fanzine (videojuegos, cine de terror, música, cómic, anime japonés…). ¿Qué es lo que más te motiva? ¿Trabajarás solo o en compañía?
3-. Elegir el título del fanzine. Se aconseja que sea lo más sencillo posible, corto y fácil de recordar.
4-. Determinar los temas que se tratarán en el primer número del fanzine. Puede ser un tema por cada página, varias páginas para cada tema o incluso más de un tema por página. Todo a nuestro gusto, para algo somos los editores y directores de nuestra propia publicación.
5-. Hacer el diseño, primero en papel, dibujando qué irá en cada página. Salvo que vayamos a editar el fanzine con los textos y dibujos a mano, después trasladaremos el diseño al ordenador.
6-. Planificar los contenidos del fanzine, documentarte y redactar. Quizás retocar alguna foto.
7-. Maquetar los textos y las imágenes. Puedes usar programas de maquetación como QuarkXpress o Adobe InDesign como los medios de comunicación, pero nosotros somos un fanzine. Así que basta con una maquetación básica usando un procesador de textos, como Microsoft Word o cualquiera de código abierto como OpenOffice.
8-. La preimpresión. Es el momento de revisar cada página y comprobar que están completas y correctamente ordenadas. Debes saber que las publicaciones impresas se elaboran mediante pliegos. Coge una hoja y dóblala por la mitad: lo que tienes entre las manos es ahora un pliego de cuatro páginas. Repite la operación con, por ejemplo, cuatro folios, y ya tendrás un fanzine de 16 páginas (cuatro pliegos). Haz una marca en estas páginas de prueba indicando el número de página, para saber cómo quedará ordenado el fanzine e imprimir todo en el orden justo y con la posición correcta del papel.
9-. Imprimir un ejemplar maestro como prueba. Sin excelencias de acabados, cuanto más modesto mejor, incluso todo hecho con fotocopias en blanco y negro y la portada y la contraportada a color. Grapamos bien las hojas y listo. Si todo está correcto, continuamos el proceso. Si no, realizamos las correcciones necesarias.
10-. Hacer copias según el número de ejemplares que necesitamos. Es más barato hacerlo a doble cara, porque usamos menos papel y es más rápido. Para imprimir fanzines lo ideal es hacerlo con impresoras A3 con función dúplex, que imprimen a doble cara automáticamente. Para empezar, unos 25 o 50 ejemplares podrían ser suficientes, máximo 100. Ya habrá tiempo de aumentar la tirada en próximos números.
11-. Distribuir y repartir en mano o en expositor los ejemplares de nuestro fanzine, calentitos y recién salidos de las ‘rotativas’ más modestas (nuestra fiel impresora A3 dúplex) para el encuentro con nuestros lectores.
12-. Promocionar nuestro fanzine. Puede ser a través de amigos o con pequeñas acciones de marketing. Una buena idea es asistir a eventos y ferias de fanzines, que de vez en cuando se celebran en bibliotecas, centros culturales, colegios e institutos de algunas ciudades con una oferta cultural amplia y activa.
Recuerda que lo más importante a la hora de publicar un fanzine de éxito es mantener intacta la motivación y sentir auténtica pasión por los temas que tratamos.
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