Si quieres descubrir las diferentes clases de pigmentos que existen probablemente deberíamos empezar por su definición. El término pigmento proviene del latín pigmentum. Este término hace referencia a un material que tiñó cambia el color De la luz que refleja. Esto es lo que hace que un pigmento empleado sobre un objeto determinado lo apreciemos de un color u otro. No obstante, los pigmentos se utilizan desde hace mucho tiempo en la pintura, en los cosméticos, en los textiles y hasta en los alimentos. Hoy nos centraremos en lo que más nos interesa a nosotros los pigmentos en imprenta.
¿Qué son los pigmentos y cuántas clases existen?
Lo primero que vamos a descubrir es que son los pigmentos en imprenta. Ya que este término se emplea para definir diferentes elementos presentes en distintas situaciones. En el caso concreto de los pigmentos en imprenta se tratan de componentes sólidos de las tintas que se emplean en impresión y que aportan el color que quedará en la superficie del impreso. Aunque muchos confunden los pigmentos con la tinta se compone de diferentes elementos entre ellos el pigmento.
Basta con pensar en los pintores clásicos y en cómo obtenían los colores. No podían acudir a una tienda y comprar un color determinado de azul o de amarillo. Tenían que fabricárselo. Para ello contaban con diferentes pigmentos que trabajaban para obtener los distintos colores.
¿Cómo se clasifican los pigmentos?
Existen diferentes grupos de pigmentos, generalmente minerales. Aunque también encontramos algunos pigmentos biológicos como la cochinilla. A la hora de enfrentarnos a los pigmentos y su clasificación encontraremos unos 3 tipos de pigmentos:
- Minerales: Fueron los primeros pigmentos conocidos.
- Biológicos: En ellos se encuentran diferentes tipos de pigmentos, para cumplir determinadas necesidades. Los que hemos empleado para teñir elementos más conocidos son: la cochinilla, añil, carmín de alizania.
- Sintéticos: son los fabricados o refinados por el hombre a partir de sustancias naturales.
Como os contábamos las primeras clases de pigmentos eran los minerales y ya se encuentran en las pinturas rupestres, donde empleaban los óxidos de hierro o el carbón vegetal para conseguir el negro. La evolución de los pigmentos nos ha llevado hasta nuestros días donde existen una variedad infinita de opciones para diferentes aplicaciones.
¿Cuáles son los pigmentos de la tinta?
Experimentos en imprenta son los que aportan color y quedan en la superficie del impreso. Los pigmentos de la tinta que más se utiliza en imprenta tienen una base vegetal. Esta base es una mezcla de aceites y resinas. En imprenta se trabaja con cuatro colores, lo que llamamos cuatricromía y que probablemente os suene como CMYK. Sus pigmentos son:
- Cian: Ftalocianina
- Magenta: Sal de Calcio
- Amarillo (Yellow): Diarilida
- Negro (black): materiales orgánicos carbonizados
¿Qué tipos de pigmentos se utilizan en una imprenta?
Entender qué son los pigmentos en imprenta no es complicado. Porque podríamos decir qué se trata de las tintas que se emplean. Para ser exactos, los pigmentos de la tinta son componentes sólidos que no experimentaron reacción. Su función es aportar color y que quede en la superficie del papel sobre el que imprimimos. Para conseguirlo se realiza un proceso de mezcla y refinado muy preciso. De este modo se consigue que el pigmento se integre en la mezcla.
Evolución de los pigmentos
Hablar de la evolución de los pigmentos es casi hablar de la propia evolución del hombre. Ya que han cambiado mucho desde aquellos primeros pigmentos que empleamos en la prehistoria. Las clases de pigmentos que tenemos hoy en día se someten a un proceso largo de refinado que nos permite usarlas en multitud de situaciones. Actualmente, es un proceso industrial que ha dejado atrás los talleres de los pintores que tenían que conseguir sus propios pigmentos. Hoy solo tendrían que ir a una tienda y comprar cartuchos de tinta.
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